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mientras tanto ... en otro barrio... en el
barrio de Floresta...
"EL OLIMPO"
Desde el 16 de agosto de 1978 y hasta fines de enero de
1979, funcionó en el barrio de Floresta entre las calles Falcón, Lacarra,
Fernández, Rafaela y la Av. Olivera, el centro clandestino de detención
conocido como "El Olimpo". En el mismo predio funcionaba la División
Automotores de la Policía Federal y desde ésa fecha comenzaba con su
actividad clandestina durante la dictadura militar. También intervinieron en
el lugar la Gendarmería Nacional y el Servicio Penitenciario Federal bajo el
mando del Primer Cuerpo de Ejército cuyos responsables pricipales eran el
mayor Minicucci y el general Guillermo Suárez Mason.
Nuevamente el "Nunca Más" nos brinda una descripción que dá testimonio
físico del lugar que alojó entre 300 y 400 detenidos-desaparecidos: "Portón
de acceso de acero, posiblemente rojo. Un tinglado de chapa de unos 10
metros de altura cubría casi todas las dependencias. Estas eran nuevas, de
unos 3 metros de altura, con techo de cemento, donde estaban dos o tres
guardias. Se entraba por la guardia. Los traslados se hacían por una puerta
de dos hojas, a la izquierda de ésta había una imagen de la Virgen. Un
sector de incomunicados con grandes ventanas ojivales, tapadas con
mampostería, dejando libre sólo una parte superior. Salita de torturas,
letrinas. Del otro lado otra sala de torturas, una celda, un laboratorio
fotográfico y dactiloscópico, una oficina de operaciones especiales. Una
cocina y un comedor enfrente. Una enfermería para curaciones y otra para
internaciones. Sala de archivo y documentación, otra para rayos X. Tres
pasillos con celdas, cada línea de celdas tenla un baño con una cortina como
puerta, en la tercera línea había un lavadero y duchas. Un cuarto de guardia
con ventana hacia la playa de estacionamiento. Una habitación mayor se usaba
para reparar los artículos del hogar, eléctricos y electrónicos robados en
los allanamientos".
El testimonio brindado por Isabel Cerrutti, secuestrada el 12 de julio de
1978 y alojada en el "Banco" y luego en "El Olimpo" hasta enero de 1979, dá
elementos para la reconstrucción interna del lugar: "Era un centro
clandestino construido sobre una gran playa de estacionamiento. Tenía tres o
cuatro salas de tortura, llamadas 'quirófano', y a la izquierda de las
mismas estaban las oficinas del GT2. En el sector de incomunicados las
ventanas estaban tapiadas con ladrillos. En el exterior había una
construcción que era utilizada como alojamiento de los oficiales. El 'pozo'
propiamente dicho era una construcción nueva, desmantelada en 1979".
En esos años, ese "barrio se llenó de gritos desgarradores, personajes
siniestros, ruidos de autos y camiones sin patentes, inundándolo todo de un
miedo paralizante... y así fue en todo el país, que se convirtió en un gran
campo de concentración".
Las fuerzas estaban divididas en los grupos de tareas GT 1, GT 2 y GT 3 de
la misma forma que en el "Banco" pero contando con mayor organización y una
aparente flexibilización en el trato a los secuestrados que luego se
revierte en forma despiadada. Según el testimonio de Isabel Cerrutti este
cambio obedeció a problemas entre los mismos represores quienes luchaban por
la hegemonía del control del lugar y así obtener mayores beneficios del
"botín de guerra".
Actualmente el predio se encuentra bajo jurisdicción de la Policia Federal
Argentina y fue declarado Sítio Histórico de la Ciudad por medio de la Ley
1197. La Ley 961 que crea el Instituto "Espacio para la Memoria" en su
artículo 3°, fija las atribuciones para el cumplimiento de su misión:
"Recopilar, sistematizar y conservar el material documental y testimonial
correspondientes a la época pertinente, el que pasará a integrar el acervo
patrimonial del Instituto "Espacio para la Memoria"…" …"Recuperar los
predios o lugares en la Ciudad donde hubieran funcionado Centros
Clandestinos de Detención o hubieran ocurrido otros acontecimientos
emblemáticos de la época, promoviendo su integración a la memoria urbana.".
Promoviendo la catalogación del inmueble se podrá recuperar la memoria de
quienes estuvieron desaparecidos y fueron torturados en el lugar con lo que
se estará dando un paso más en la recuperación de la memoria colectiva de
nuestro pasado más reciente y doloroso.
FUENTE:
http://www.ciudadbaires.com.ar/proy-cat/0402452.html
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