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mientras tanto ... en otro barrio...
tIpico de edificio
en esquina construido en LA CIUDAD DE BUENOS AIRES durante las primeras
dEcadas del siglo XX
catalogación del edificio sito en
Av. Corrientes 4098, que constituye un ejemplo típico de edificio en esquina
construido en nuestra ciudad durante las primeras décadas del siglo XX, en
el que la planta baja estaba ocupada por locales –con acceso por la ochava-
en tanto los pisos superiores eran ocupados por viviendas.
En este caso, la planta baja aloja dos
locales, y los pisos superiores –primero y segundo- dos viviendas cada uno,
a las que se accede desde cuatro puertas divididas en dos pares ubicados uno
a cada lado de la fachada.
Los locales cuentan con un depósito,
baño, cocina y un sótano. Uno de ellos posee, además, un pequeño patio desde
el cual una escalera conduce a un altillo con dos habitaciones de
dimensiones reducidas. Cada una de las viviendas del primer piso ocupa uno
de los frentes a la calle, completándose la iluminación y ventilación con un
patio ubicado en el centro de la construcción. Cada escalera nos deja en un
hall privado que comunica con el comedor y la sala. Las viviendas cuentan
con tres dormitorios, una sala, comedor, baño y cocina. Tanto los
dormitorios como la cocina y el baño se distribuyen alrededor del patio,
siendo éste, en algunos casos, la única vía de acceso a ellos. Esto
evidencia la fuerte influencia que la distribución de la “casa chorizo” tuvo
en los tipos subsiguientes, a medida que los procesos de densificación
fueron exigiendo modelos con mayor grado de explotación del suelo,
sustituyéndose los edificios de una planta por construcciones de dos o más
niveles.
En el segundo piso, las viviendas
replican esta distribución. Un pasadizo a manera de balcón sobre el patio
del primer piso permite la conexión de los sectores íntimos de la casa.
La fachada, de lenguaje italianizante y
sobrio diseño, se compone en base a un eje vertical ubicado sobre la ochava,
cuya presencia se subraya mediante un tratamiento que unifica los tres
niveles y genera una lectura vertical de la esquina. Esta fuerte
verticalidad es equilibrada por el tratamiento diferenciado que se da a cada
nivel a ambos lados de la ochava, lo que genera una lectura de capas
horizontales superpuestas.
En la planta baja encontramos, sobre la
ochava, el acceso al local que da sobre Acuña de Figueroa, enmarcado por un
arco rebajado. Junto a éste, sobre la Av. Corrientes, se observa un acceso
más pequeño al segundo local, la vidriera del mismo y las dos puertas que
dan acceso a las viviendas del primer y segundo piso de este sector. El
frente del edificio sobre Acuña de Figueroa es más largo y en él
encontramos, al nivel de la planta baja, dos paños de vidrieras y las dos
puertas de acceso a las viviendas.
En el primer piso, el sector de la
ochava está ocupado por la ventana del dormitorio principal de una de las
residencias. Ésta es de forma rectangular y presenta un pequeño balcón con
reja de hierro ornamentada. En la fachada de la Av. Corrientes, sobre las
puertas de acceso, encontramos un balcón que corresponde a la ventana de una
de las salas. Un balcón de porte mayor y bella herrería unifica las dos
ventanas del comedor. Sobre el otro lado, el balcón corrido abarca los
ventanales de dos dormitorios y el comedor, en tanto que la sala posee su
propio balcón. Este esquema se repite en el segundo piso, con la excepción
de la ochava, donde la ventana rectangular se transforma en tres pequeñas
ventanas que rematan en arcos de medio punto, los cuales están ornamentados
por una serie de bajorrelieves con forma de capitel jónico. Asimismo, el
balcón que da sobre la calle Acuña de Figueroa es más corto en este nivel,
abarcando únicamente las ventanas del dormitorio. Sobre esta sucesión de
franjas horizontales se ubica una cornisa sostenida por ménsulas
ornamentales y, rematando todo el conjunto, una balaustrada de original
diseño recorre toda la fachada.
El Código de Planeamiento Urbano
establece, en su Sección 10, las herramientas para la protección y
preservación de aquellos inmuebles que revistan para la ciudad valor
urbanístico, arquitectónico, histórico-cultural y/o singular.
El valor urbanístico se define como las
cualidades que posee un edificio que define o califica la trama, el paisaje
urbano o el espacio público; el valor arquitectónico, se otorga a los
elementos poseedores de calidades de estilo, composición, materiales,
coherencia tipológica y otra particularidad relevante y el valor
histórico-cultural lo ostentan aquellos elementos testimoniales de una
organización social o forma de vida que configuran la memoria histórica
colectiva y un uso social actual.
El edificio cuya catalogación se propone
por el presente preside la esquina, otorgando a su entorno inmediato un
fuerte carácter y calificando el espacio público. Además, resulta un ejemplo
paradigmático de una solución ampliamente aplicada para los predios de
esquina durante las primeras décadas del siglo XX, fuertemente emparentada
con la “Casa Chorizo”, tipo edilicio que tuvo un rol protagónico en la
conformación del tejido de la Ciudad de Buenos Aires. El inmueble en
cuestión resulta testigo de las condiciones económicas y socio culturales
particulares del momento histórico en que se originó. Por todo esto, y de
acuerdo con los parámetros arriba mencionados, consideramos que estos
inmuebles poseen para la Ciudad indudables valores urbanísticos,
arquitectónicos e histórico-culturales, los cuales hacen necesaria su
preservación.
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